Coñac St Rob Extra

St Rob Extra - Un coñac tan rico como su historia

Envejecido durante varias décadas en pequeñas barricas de roble Limousin, el St Rob Cognac Extra posee una persistencia excepcional en el paladar, debido al ambiente húmedo de sus legendarias bodegas. Esta maduración magistral confiere al coñac Extra un color oscuro y profundo y un maravilloso aroma amaderado de roble en nariz.

La finca de St Rob se encuentra en los terrenos de una antigua abadía que, hasta hace poco, estaba en ruinas. Tras la revolución francesa de 1789, muchos miembros de la nobleza y la aristocracia vieron cómo sus vidas cambiaban para siempre. El convento de Saint Robert fue víctima de esta tragedia. El recinto era famoso gracias a la exquisita capilla, la elegante granja y el místico manantial, del que se decía que tenía propiedades medicinales para quienes bebían de él.

Con el paso de los siglos, el convento fue destruido y olvidado, destinado a desaparecer para siempre. Sólo cuando René-Luc Chabasse (de Chabasse Cognac) descubrió esta pequeña aldea, decidió comprar la histórica finca de 60 hectáreas.

Chabasse vio el potencial de la finca, que se extendía por los terruños de Fins Bois y Borderies. Convertida en una marca de coñac consolidada y conocida, la finca ha resurgido de sus cenizas (o ruinas...) como un ave fénix, que se ha convertido en el logotipo de la casa de coñac, estampado en sus botellas como símbolo de renacimiento.

Los sabores de sus coñacs son tan ricos como su historia, y el dominio se ha hecho un nombre entre los entendidos gracias a las cualidades elegantes y equilibradas de sus mezclas.

Cómo disfrutarlo:

Un coñac extra añejo como éste debe disfrutarse puro, preferiblemente en una copa de balón o en una copa tulipán tradicional, para poder apreciar plenamente los frescos aromas de violetas y cacao que perfuman el paladar, así como los inconfundibles aromas de roble que sólo pueden desarrollarse gracias a las décadas que ha pasado madurando pacientemente en las históricas bodegas de la propiedad.

Presentación de la botella:

Un diseño oscuro y lujoso de negro y dorado señala este coñac como un producto rico y refinado sólo para los paladares más particulares. El moderno dibujo en forma de tatuaje del ave fénix que aparece en el cuello, la etiqueta y el cuerpo de cristal de la botella representa no sólo el renacimiento y la renovación de la finca, sino también un símbolo de fuerza, de saber hacer y del estatus legendario de esta marca mítica y ahora icónica.