Coñac Remi Landier XO Jens Garrafa

Coñac Rémi Landier XO Carafe Jens

Rémi Landier XO Carafe Jens es un coñac sutil y elegante 100% Fins Bois envejecido durante al menos 10 años. Habiendo madurado exclusivamente en barricas de roble francés con alternancia de barricas nuevas y barricas rojas, es un coñac delicadamente redondo marcado por sus aromas dominantemente afrutados con notas de roble, especias y vainilla. Un Cognac versátil que hará las delicias tanto de conocedores como de principiantes.

Remi Landier y sus hijos crearon su marca familiar de Cognac en 1973, al darse cuenta de la singularidad del terruño de Fins Bois y de los aguardientes que produce. Como destiladores de algunas de las mayores casas comerciales de Cognac, sólo producen una pequeña cantidad con su propia etiqueta, que hoy en día está dirigida por Jean-Yves Landier y su hija Geraldine, la cuarta y quinta generación de productores. Ofreciendo una gama completa de coñacs, desde VS a XO, así como ediciones raras y limitadas, esta empresa muy unida no sólo hace uso de la calidad y la experiencia cuando se trata de coñac, sino que el Pineau des Charentes de la marca también se beneficia de una excelente reputación.

Presentación de la botella

Presentado en una lujosa garrafa y un estuche de regalo, este coñac XO es un regalo generoso para un conocedor de coñac exigente. Vestida con una cristalería cuadrada de base pesada, la botella presenta detalles negros y dorados que infunden aún más sofisticación a la presentación general. Su caja a juego en negro mate con tipografía dorada en espiral contrasta perfectamente con el color del coñac contenido en la botella, que capta la luz con reflejos cobrizos. Una presentación tan deslumbrante merece el centro del escenario en el bar o un preciado lugar como centro de mesa cuando se recibe a los invitados.

Cómo disfrutarlo

Delicado, potente y equilibrado, Remi Landier XO puede disfrutarse puro o con hielo. Marida muy bien con un foie gras, un pichón, un queso azul o un postre de chocolate y puede servirse como un magnífico digestivo al final de una comida indulgente.