Coñac Marancheville L'Exemplaire No. 4 Edición Limitada

Coñac Marancheville Exemplaire N°4

Exemplaire N°4 es la cuarta edición de la serie limitada Exemplaire de Marancheville, que se erige orgullosa como una colección de coñacs que simboliza la pasión de la marca por una calidad excepcional que se sitúa en una liga propia. Ofrecidos en pequeñas cantidades y renovados cada año, "Les Exemplaires" son el fruto de nuestro saber hacer y nuestras inspiraciones.

Proceden de una mezcla de aguardientes destilados sobre lías a principios de los años 80 en la propiedad de Marancheville. El N°4 se sometió a un largo proceso de maduración (de 35 a 40 años); durante este tiempo, los aromas se concentran lentamente y emerge una bella complejidad. En este coñac, en particular, predomina el matiz de la naranja confitada, que, combinado con una estructura amaderada, lo convierte en una sensacional delicia otoñal o festiva.

Se trata de un coñac de edición limitada, elaborado en pequeñas cantidades e íntegramente con aguardientes de la Grande Champagne. Sólo hay 257 botellas disponibles de este delicioso néctar, lo que lo convierte en una rara joya del premier cru.

Disfrutar de una mezcla de coñac de Marancheville sólo puede significar sumergirse en la elegancia y el poder de este apreciado terruño de Cognac. Su filosofía es sencilla: no hace falta ser un experto en coñac para apreciar un buen coñac.

Presentación de la botella

Diseñado con clase y con un ojo puesto en destacar, Marancheville favorece diseños de botella únicos y contemporáneos que se diferencian del resto. Verdadera representación de la calidad y el buen gusto, la forma depurada y la elegancia discreta encarnan a la perfección los valores modernos de la marca. Por su parte, los detalles del producto escritos a mano en la etiqueta reflejan las raíces tradicionales del coñac y la herencia de la casa con un toque de autenticidad.

Cómo disfrutarlo

Envejecido a la perfección, el N°4 está clasificado como un coñac de calidad XO, aunque algunas de sus eaux-de-vie pasaron hasta 40 años envejeciendo en barricas de roble francés. Por ello, recomendamos degustar esta joya del coñac de la forma tradicional, solo y a temperatura ambiente. Si lo desea, puede añadir unos cubitos de hielo a la copa para que los aromas se abran aún más.