Le Roch Cognac

Durante su carrera como corredor y mayorista, Jean Grosperrin pronto se dio cuenta de que muchos productores de vino tenían muchos tesoros escondidos en sus bodegas. Es habitual que las barricas de coñac extremadamente antiguas pasen de generación en generación, y Jean utilizó sus numerosos contactos para poder adquirir algunos de estos coñacs tan codiciados.

Su visión era crear coñacs de calidad que celebrasen estos años de antigüedad, en lugar de que sus sabores únicos se perdiesen para siempre en las mezclas producidas por algunas de las casas más grandes y comerciales. Comprometido con esta creencia, su casa de coñac comenzó a producir aguardientes que se adaptaran a todos los niveles de paladar y precio.

Guilhem Grosperrin dirige hoy esta casa familiar. Todos sus coñacs se elaboran bajo el más estricto control, y los coñacs Le Roch se crean a partir de uvas procedentes de las zonas de Petite y Grande Champagne. Y aunque la empresa adopta, por supuesto, la tecnología moderna en la creación de sus productos, se trata de métodos tradicionales.

Grosperrin está convencido de que otros comparten su pasión por ofrecer al público coñacs prácticamente directos del productor, en lugar de comprarlos siempre a las grandes casas comerciales.

La marca Le Roch produce dos coñacs. Se trata del Le Roch VSOP Petite Champagne, una mezcla de tres coñacs, y del Le Roch XO Extra Old Grande Champagne, producido a partir de las regiones de Petite y Grande Champagne y que puede adquirirse por unos 85 euros.

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